Joaquín Guzmán Loera, «El Chapo», es no sólo la persona más buscada de México:
También es, desde ahora, el delincuente con la más alta recompensa por su captura en la historia del país.
La procuradora (fiscal) General de la República, Arely Gómez, informó que el gobierno mexicano está dispuesto a pagar 60 millones de pesos, unos US$3,8 millones por datos para reaprehenderlo.
La histórica recompensa forma parte de las acciones del gobierno mexicano para recapturar al capo.
La noche del pasado sábado, Guzmán Loera se fugó de la cárcel de máxima seguridad de El Altiplano, ubicada a unos 90 kilómetros al oeste de la Ciudad de México.
De acuerdo con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, para fugarse el capo pudo recibir ayuda de funcionarios o custodios de la prisión.
«De confirmarse esta versión constituiría un acto de corrupción, deslealtad y traición a los mexicanos», dijo.